Hoy vamos a hablar de los tonos con tintes violáceos.
El violeta en general es un tono “polémico” porque nunca está muy claro a qué nos referimos al nombrar este tono. Tiene un espectro muy amplio: desde violetas profundos, a lilas, a más morado, borravino u obispo.
Y si bien se lo juzga por ser frío, debemos saber que es una cruza de azul y rojo, por lo tanto puede que se vea más frío o más cálido dependiendo de la cantidad que tenga de uno (más frío si va más hacia azul) o de otro (más cálido si tiene más de rojo).
Como pueden ver arriba, el violeta está frente al amarillo en el círculo cromático. Entonces en general, en los ojos con iris que contengan ese color, va a lograr exponenciarlos al máximo: ojos verdes o ojos marrones con motitas más amarillas o caramelo.
Para mí si es bien oscuro, como un berenjena, da el efecto de un negro sin caer en algo tan rígido. Es un gran aliado sino quieren algo demasiado intenso pero le da una profundidad a la mirada, increíble. Recuerdo la 1era vez que usé un delineador en un color así, para la línea de agua. Fue un antes y un después. Todavía lo guardo y lo uso mucho. Es como un paso intermedio entre el negro y el marrón. Es el tono bordeuxline de MAC, que no lo encontré en la pagina, pero les dejo un link para que puedan ver el tono. Ver Online
También los tonos más ciruelas o morados le quedan bien a los ojos marrones o verdosos, incluso a los celestes porque ese subtono rojizo le combina mejor. El efecto es de mayor calidez. Suaviza la mirada. Solo hay que tener cuidado, que si tiene demasiado tinte rojo, no vaya a hacer ver el ojo irritado o cansado.
Otro tema qué hay q cuidar, son las personas que tienen ojeras pronunciadas en tonos azulados o violáceos. Porque usar esos tonos en el párpado, puede enfatizarlos, y hacer parecer el ojo como una gran mancha en todo el ojo. Y lo evitaría por completo en un delineado en la parte inferior del ojo.
Es más…aunque no tengas ojeras, usar tonos violetas muy oscuros con mucha intensidad, puede traer este defecto, de generar ojera visual aunque no exista. Así que hay que ser muy prolijas con el corrector, para que quede lo más despejada la zona de cualquier oscuridad.
Como siempre, lo ideal es empezar a usar este tipo de tonos en pequeñas dosis. El juego con un delineador es de lo más sencillo. Sea un ciruela (más claro y rojizo) o un berenjena (más profundo y azulado). Yo les dejo este look usando el delineador de Maybelline en tono 320 vibrant violet.
Por último, el violeta en su versión más claro tipo lila o lavanda, puede ser una opcion. Aunque siento que a veces estos tonos pueden verse medio ochentosos. Hay que tener cuidado que no nos avejenten la mirada. Mates o brillantes, yo los usaría con discreción.
Incluso, pueden jugar combinando violetas morados con violetas liláceos , y esas complementariedad de tonos fríos y cálidos, es súper diferente. O también sumar violeta a un look con naranja, que es un contraste que queda divino.